Qué hacer si tu audífono empieza a silbar

El silbido es un ruido desagradable en muchos contextos, pero el silbido de tu audífono puede ser una señal de que algo no funciona correctamente. Hay muchas cosas que pueden hacer que los audífonos silben, pero todas tienen solución.

Muchas personas se estremecen cuando escuchan ruidos desagradables, ya sea el chirrido de una silla o un ruido fuerte en una canción. Para quienes tienen pérdida auditiva, un silbido repentino y abrupto en su audífono puede deberse a varias cosas, incluidas acciones como abrazar a alguien. Si bien algunos de estos silbidos pueden significar que tu audífono necesita reparación, otros se pueden solucionar con ajustes simples.

Obstrucciones de cerumen

Tus audífonos funcionan transmitiendo el sonido a tu canal auditivo. Si este sonido no tiene a dónde ir, rebotará en tu audífono, lo que provocará una retroalimentación silbante. Si tienes una acumulación de cerumen, puede provocar una obstrucción en tu canal auditivo. Esto puede causar dolores de oído, interferir con tu audífono e incluso dañarlo si no se trata. Asegúrate de que un profesional te limpie los oídos y revisa tu audífono para ver si hay receptores o rejillas de ventilación obstruidos.

No estás usando tus audífonos correctamente

No te preocupes, esto le pasa a todo el mundo. Cuando te colocas el audífono de forma incorrecta, puede provocar problemas de retroalimentación, como silbidos. Prueba a quitarte los audífonos y asegúrate de que estén en los oídos correctos. Si esto no resuelve el problema, prueba a introducir el receptor más profundamente en el oído. Llevar los audífonos demasiado sueltos puede provocar silbidos, así que asegúrate de llevarlos correctamente.

Moldes o tubos mal ajustados

Con el tiempo, tus oídos pueden cambiar de forma. Esto puede provocar que tus moldes comiencen a fallar. Un molde suelto puede permitir que el sonido se escape, lo que hace que tu audífono silbe. Para solucionarlo, simplemente acude a tu profesional de la audición y pídele que te coloque unos moldes nuevos. Al igual que los moldes, los tubos también pueden deteriorarse con el tiempo y requerir un reemplazo. El tubo puede arrugarse o partirse, lo que provoca una retroalimentación desagradable. Una visita a tu profesional auditivo puede resolver esto fácilmente.

El volumen está demasiado alto

Subir el volumen de los audífonos puede hacer que el sonido vuelva a entrar en ellos, lo que provoca problemas de retroalimentación y silbidos. Simplemente baja el volumen de los audífonos para evitar esto y no lo subas más allá de cierto punto. Si tienes problemas de audición, habla con tu profesional de la audición sobre las soluciones para ese problema.

Otras fuentes

Usar sombreros, bufandas y otros elementos para cubrirse la cabeza puede cambiar la ruta de retroalimentación de tus audífonos. Esto puede provocar el infame silbido o una serie de pitidos molestos e interferencias de sonido. Para evitarlo, quítate la bufanda o el sombrero. Bajar el volumen de tu audífono también puede ayudar con este problema.

Dar abrazos a las personas también puede provocar pitidos o silbidos cortos. Al igual que con los sombreros o las bufandas, el cuerpo de la persona está cambiando la ruta de retroalimentación hacia su audífono. Si bien estos efectos secundarios desagradables son una parte inevitable de muchos audífonos, no deberían afectar demasiado tu experiencia. Si sufres de retroalimentación constante y molesta, habla con tu médico. También podrías estar sufriendo uno de los problemas anteriores.

Si bien el silbido de tu audífono puede preocuparte seriamente, por lo general no es algo de lo que preocuparse. Sucede ocasionalmente y se puede solucionar la mayoría de las veces. Si bien puede resultar complicado reemplazar partes de tu audífono o limpiarte los oídos, es una parte necesaria para mantener bien tu audición y tu salud auditiva.

Si tiene preguntas sobre tus audífonos y cómo funcionan, usa nuestro localizador de tiendas para encontrar un profesional de la audición cerca de ti.
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