Señales de advertencia de pérdida auditiva

Cuando se trata de pérdida auditiva, solemos pasar por alto casos que no son congénitos o que afectan a personas mayores. Sin embargo, la pérdida auditiva no solo afecta a bebés y personas mayores: puede ocurrir a cualquier edad y las señales de advertencia suelen aparecer años antes de que aparezcan los síntomas más graves. A continuación, presentamos una descripción general rápida de la pérdida auditiva, qué buscar y qué necesita saber sobre el tratamiento y la prevención.

Pérdida auditiva: descripción general

La pérdida auditiva puede presentarse de diversas formas, causadas por diversos problemas en los oídos y los nervios que los componen. Existen cuatro tipos generales de pérdida auditiva, que son:

• Pérdida auditiva conductiva
• Pérdida auditiva neurosensorial
• Pérdida auditiva mixta (una combinación de pérdida auditiva conductiva y neurosensorial)
• Pérdida auditiva del nervio auditivo (técnicamente un tipo de pérdida auditiva neurosensorial)

La pérdida auditiva neurosensorial representa el 90% de los casos de pérdida auditiva y es la forma más común de pérdida auditiva. Se produce cuando la cóclea comienza a degradarse, lo que conduce a una pérdida auditiva gradual con el tiempo. La cóclea es un órgano del oído interno recubierto de pelos diminutos. Estos pelos captan el sonido y determinan el volumen y la frecuencia de estos sonidos antes de transmitirlos al cerebro. Con el tiempo, estos pelos comienzan a desgastarse, lo que conduce a la pérdida auditiva neurosensorial. La exposición al ruido y otros sonidos fuertes pueden acelerar este proceso.

Descartando los mitos

Nuestros oídos son extraordinariamente malentendidos. Antes de poder hablar seriamente sobre la pérdida auditiva, debemos aclarar cualquier información errónea.

“La pérdida auditiva solo afecta a las personas mayores”.

Este es un concepto erróneo perjudicial. Si bien las personas mayores son más propensas a desarrollar pérdida auditiva, cualquier persona a cualquier edad puede comenzar a perder la audición. Incluso los adolescentes y los adultos jóvenes pueden desarrollar pérdida auditiva en determinadas condiciones. Muchas personas no se hacen pruebas de audición porque creen que es un “problema de personas mayores”, lo que las lleva a pasar por alto importantes señales de advertencia sobre su audición. Cuando difunde este mito, está contribuyendo a ese problema.

“La pérdida auditiva significa que pierde toda su audición.”

Esto está muy lejos de la realidad. Solo algunos casos de pérdida auditiva dejan a las personas con problemas auditivos profundos o sordera total. Algunas personas solo tienen problemas para oír ciertas frecuencias, voces y sonidos (como las consonantes), mientras que otras simplemente tienen dificultades para oír en habitaciones ruidosas y sufren tinnitus. Cada caso de pérdida auditiva es diferente y no todos implican una pérdida total de la audición.

“Los audífonos y la cirugía pueden solucionarlo.”

Los audífonos y la cirugía son tratamientos, no parches. No se pueden aplicar en todos los casos de pérdida auditiva, y ambas opciones de tratamiento son decisiones serias. No solucionan la pérdida auditiva, alivian los síntomas y facilitan el funcionamiento. Una vez que se pierde la audición, no se puede curar, pero sí compensar con audífonos.

Señales de alerta temprana de pérdida auditiva

Los síntomas de la pérdida auditiva pueden ser fáciles de ignorar, especialmente cuando se expresan de una manera determinada. “Problemas de audición”, “estrés” y “fatiga” son términos generales, y puede ser difícil determinar si lo que está experimentando es en realidad una pérdida auditiva. La pérdida auditiva neurosensorial se produce de forma gradual, por lo que es posible que no se dé cuenta de que su audición está afectada. Puede manifestarse de formas insidiosas, haciéndole pensar que el problema está en otra parte.

A continuación, se muestran algunos signos específicos de pérdida auditiva que puede identificar en su vida diaria.

• Sentirse realmente agotado física y mentalmente después de un largo día de escuchar a la gente hablar.
• Sentirse perdido/a en las conversaciones, especialmente en las conversaciones grupales.
• Pedirle a la gente que repita lo que dijo con frecuencia.
• Subir el volumen de la música o la televisión lo suficiente como para que los demás hagan comentarios al respecto.
• Evitar fiestas, reuniones y restaurantes ruidosos.
• Tener problemas para entender las voces de ciertas personas, como las de las mujeres o los niños.
• Con frecuencia, escuchar mal ciertas palabras como si fueran otras.
• Irritarse, estresarse o abrumarse fácilmente por ruidos, voces o sonidos fuertes.

Si sufre estos síntomas, puede ser una señal de que su audición se ha visto afectada. Es importante que se haga una prueba de audición lo antes posible. Si tiene pérdida auditiva, el diagnóstico y el tratamiento del problema pueden mejorar su calidad de vida, su carrera y sus relaciones.

Causas de pérdida auditiva

La pérdida auditiva neurosensorial se debe principalmente a la exposición al ruido. Esto implica cualquier exposición prolongada a ruidos fuertes, chirriantes o intensos. Estos ruidos incluyen música, motores, herramientas eléctricas y otras fuentes de sonido fuerte. Las fuentes más comunes de exposición al ruido provienen de:

• Pasatiempos ruidosos. Si disfruta de asistir a conciertos, festivales, exhibiciones de autos, campos de tiro, juegos deportivos, clubes y otros eventos ruidosos, es más probable que sufra exposición al ruido. Aquellos que disfrutan de pasatiempos que incluyen instrumentos ruidosos o herramientas eléctricas también son más propensos a la pérdida de audición con el tiempo.
• Condiciones de trabajo ruidosas. Los músicos (enlace a un nuevo artículo sobre músicos), trabajadores de la construcción, pilotos y otros trabajadores en condiciones ruidosas son más susceptibles a la exposición al ruido. Por eso es vital que las personas que trabajan en condiciones ruidosas usen protección auditiva.
• Vivir en una ciudad ruidosa. Si vive en una ciudad ruidosa que experimenta mucho tráfico y mucha población, la exposición al ruido es un riesgo. No puede escapar del sonido, incluso cuando está dormido o relajado en su casa. Su riesgo aumenta si usa formas de transporte público ruidosas, como el metro. Se recomienda que las personas que viven en ciudades densas usen tapones para los oídos o auriculares con cancelación de ruido cuando puedan.
• Falta de protección auditiva. Por encima de todo, la falta de protección auditiva es la causa principal de la pérdida auditiva. Si planea asistir a eventos ruidosos, tiene un trabajo ruidoso o viaja regularmente en metro, debería invertir en tapones para los oídos para protegerse. Aunque es posible que ahora no sienta los efectos de la exposición al ruido, más adelante sí los sentirá.

Tratamientos para la pérdida auditiva

Los tratamientos para la pérdida auditiva han avanzado mucho en las últimas dos décadas y se mejoran constantemente. Estas son sus opciones si recientemente le han diagnosticado pérdida auditiva

• Audífonos. La forma más común de tratamiento. Si bien no reemplazan la audición, sí facilitan la audición. La tecnología de los audífonos ha mejorado mucho y muchos modelos son más pequeños y refinados que nunca. Se ha mejorado la funcionalidad y algunos modelos ofrecen funciones como procesamiento de la propia voz y conectividad Bluetooth.
• Enmascaradores de tinnitus. Si sufre de tinnitus, estos dispositivos pueden brindarle alivio. Algunos audífonos vienen con terapias para tinnitus instaladas.

Si su pérdida auditiva es leve, puede sentirse tentado/a a cambiar su estilo de vida para “enfrentarla”. Sin embargo, cuanto antes comience a usar audífonos para aliviar su pérdida auditiva, es probable que mejore su calidad de vida y su bienestar. No es una buena idea posponer el tratamiento hasta que su pérdida auditiva empeore, cuando podrá seguir disfrutando del estilo de vida que tenía antes gracias a los audífonos modernos.

Prevención y protección

La prevención y la protección son las únicas formas de evitar realmente la pérdida auditiva. Incluso si su audición ya está afectada, tomar medidas para proteger lo que le queda puede evitar que empeore. Las medidas preventivas incluyen:

• Usar tapones para los oídos. ¿Va a ver un espectáculo? ¿Va a tomar el metro? ¿Se dirige al trabajo? Póngase unos auriculares con cancelación de ruido o use sus propios tapones para los oídos.
• Descansa. Si ha tenido un día ruidoso, relájese y disfrute de la tranquilidad después. Sus oídos necesitan descansar.
• Baje el volumen de la música. La música alta se está convirtiendo en un riesgo grave de exposición al ruido. Baje un poco el volumen y limite el tiempo que pasa usando auriculares o audífonos.
• Apague el televisor. Si no lo está mirando activamente, intente eliminar esa fuente de ruido de fondo.
• Limite el tiempo que pasa en clubes, conciertos y fiestas. Según el nivel de ruido, no debería pasar mucho tiempo en eventos ruidosos. Mire su reloj a menudo y no se quede más de unas pocas horas.
• Hágase exámenes de audición con frecuencia. Debe visitar a un audiólogo cada pocos años para que le haga un examen de audición. Si está entre visitas o quiere hacerse un examen de audición ahora, haga la prueba de audición en línea Signia para tener una idea general de su capacidad auditiva. Si hay algo mal, puede visitar a un profesional para que le haga un audiograma completo.

¿Le resultó útil este artículo? Signia Hearing ofrece artículos y guías sobre todos los temas relacionados con el oído: pérdida auditiva, salud auditiva, audífonos y conocimientos generales. Hay mucho que aprender sobre nuestros oídos y Signia Hearing tiene como objetivo aclarar conceptos erróneos y proporcionar información confiable y accesible para todos.